Mi habitación, hoy, es el reflejo del después que queda tras tu visita, tras todas esas vivencias que encierra y que posee desde el momento en el que llegaste. Hoy mi habitación refleja desorden, el desorden que se habita en mi ante tu partida y la indiferencia hacia mi entorno mismo. Siempre es así, cambia radicalmente a momentos; es como cuando pasa un tornado, pero yo persigo con urgencia ese tornado desde hace ya, más de dos años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario