martes, 15 de noviembre de 2011

Póquer


Imagen No. 1

Hoy sólo quiero ver esa pintura de los perros jugando póquer e imaginar —como en los memorables días de mi infancia—, pensar detalladamente en la actitud de cada uno de ellos, identificar sus gustos, sus fobias, escuchar delicadamente la forma en que pronuncian su inglés —obvio—, oler el tabaco que fuman y, por qué no, aceptar jugar una ronda con todos ellos. Todo lo anterior después de sentarme en cada una de las sillas de la imagen No. 1.