Hablemos de los recortes de tu diario, de las cuatrocientas palabras que jamás entenderé y de las modificaciones a tu firma. Hablemos y lleguemos a un acuerdo esta noche. Que sea esta noche y no esperar hasta el fin de semana, días de desvelo y cansancio preestablecido. Comparte conmigo las fotos de los débiles hombres caídos, de los tristes entes de la noche larga, la razón de escuchar música clásica mientras lavamos los platos. Dime que sientes cuando entro al living, quiero saber que es lo que piensas cuando me ves en el diván, leyendo algún libro de latinoamericanos que no son del boom, ¿qué ves en mi? Ocupame esta noche, mientras escucho jazz fusión y leo los perros románticos de Bolaño. ¿Qué sientes en mi? ¿Planicies? Dime, que hoy es para sabernos más...
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